Cultivado en la antigua ciudad de Kandy, la capital cultural de Sri Lanka, este té del medio país proporciona un sabor único y atractivo. Un licor de color dorado oscuro con fuertes caracteres de cuerpo, los tés de Kandy se cultivan entre 2000 y 4000 pies sobre el nivel del mar. Un té que se puede disfrutar con un toque de crema y edulcorante como bebida relajante durante todo el día.
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